Uno de los documentos de inmigración más solicitados en Estados Unidos es el Documento de Autorización de Empleo (EAD), conocido popularmente como permiso de trabajo, que permite a los no ciudadanos demostrar a los posibles empleadores que están autorizados a trabajar en el país durante un tiempo determinado.
Los permisos de trabajo pueden renovarse una vez caducados, pero los retrasos crónicos en los procesos de inmigración, agravados por la pandemia del COVID-19, crearon un problema para cientos de miles de solicitantes y sus empleadores, ya que su trabajo se vio repentinamente interrumpido porque la renovación del permiso no llegó a tiempo.
El martes, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) anunció que los trabajadores inmigrantes, bajo ciertas categorías, cuyos permisos de empleo expiren, podrán seguir trabajando legalmente durante 18 meses después de la expiración.
La norma temporal, que entrará en vigor de inmediato el miércoles 4 de mayo, “ayudará a evitar brechas en el empleo para los no ciudadanos que tienen solicitudes de renovación de EAD pendientes y asegurará la continuidad de las operaciones para los empleadores estadounidenses”, dijo la agencia en un comunicado de prensa.
Actualmente, USCIS concede una prórroga automática de 180 días a los trabajadores con un EAD caducado que soliciten una renovación con el formulario I-765, Solicitud de Autorización de Empleo.
Pero esa prórroga ha sido insuficiente, ya que la agencia de inmigración se enfrenta a un retraso de alrededor de 1.5 millones de solicitudes de autorización de empleo, lo que dejó a decenas de miles de personas sin la posibilidad de trabajar legalmente en tiempos de escasez de mano de obra.
“Esta regla temporal brindará a los no ciudadanos elegibles para la extensión automática la oportunidad de mantener el empleo y brindar apoyo crítico a sus familias, al tiempo que se evitan interrupciones adicionales para los empleadores estadounidenses”, dijo la directora de USCIS, Ur M. Jaddou, en un comunicado.