Mañana lunes 27 de julio, la farmacéutica estadounidense Moderna empieza la fase 3 del ensayo de su vacuna experimental contra la enfermedad de la COVID-19 y ha logrado doblar la financiación gubernamental del fármaco hasta 955 millones de dólares, según anunció este domingo.
Moderna señaló, mediante un comunicado que ha modificado su contrato con el organismo BARDA (Biomedical Advanced Research and Development Authority) para que amplíe en 472 millones de dólares la cantidad inicial que iba a destinar al desarrollo de la vacuna mRNA-1273, que entra en su etapa avanzada.
«Tras discusiones con la Administración de Alimentos y Fármacos de EE.UU. y consultas con la Operación «Warp Speed» en los últimos meses, la compañía ha decidido ejecutar una tercera fase del ensayo clínico significativamente más grande, lo que dejaba una brecha en la financiación de BARDA que se cerrará gracias a esta modificación de contrato», anunció.
El contrato original con ese organismo proveía 483 millones a Moderna para el desarrollo de la vacuna mRNA-1273, que originalmente iba a tener un «número más pequeño de participantes en la fase 3» en comparación con los 30.000 voluntarios que necesitará en Estados Unidos, como informó la firma.
«Agradecemos a BARDA su continuo compromiso con mRNA-1273, nuestra vacuna candidata contra COVID-19», dijo citado en la nota el consejero delegado de Moderna, Stéphane Bancel, quien señaló los «alentadores» datos de la fase 1 que llevan a la firma a pensar que pueden «ayudar a abordar la pandemia» y «prevenir futuros brotes».