23 de junio de 2019 – 13:06 – Por PEDRO MENA Esta semana tuvimos hechos y acontecimientos políticos muy importantes en el estado de Florida. Después del exitoso acto público, en la ciudad de Orlando, con más de 20 mil personas, del lanzamiento de la candidatura presidencial a la relección 2020, nuestro presidente amigo Donald Trump realizó una jornada triunfal de recolección de fondos para su campaña en la ciudad Doral, donde admira mucho el trabajo de los venezolanos, grabando un programa especial de TV para la cadena nacional Telemundo, con el reconocido periodista José Díaz-Balart, hermano menor de nuestros amigos parlamentarios Lincoln Díaz-Balart y Mario Díaz-Balart, republicanos por Florida. Ambos eventos confirman la importancia política electoral de este estado en la contienda presidencial del próximo año.
Un analista político serio, que respete a sus lectores, siempre debe de cuidarse de cometer errores, en sus apreciaciones o pronósticos políticos, porque corre el riesgo de perder su credibilidad y confianza que es fundamental para tener éxito en su línea de comunicación con la opinión pública. No puede ser sentimental, emocional, fanático y mucho menos proyectar la imagen de ser un “activista más”, al servicio de intereses personales o grupales. Una dictadura electoralista como la de Bolivia no tiene ninguno de los elementos esenciales de la democracia establecidos por el artículo 3 de la Carta Democrática Interamericana. Sin expresión libre no hay política, menos democracia. El ser humano, agente y destinatario de la información, medra afectado por el fenómeno corriente de la sobreabundancia informativa, que es cierto y acaso causa desinformación en los desprevenidos. Debe ser estudioso e intérprete de los diversos instrumentos de medición de la opinión pública nacional o local.