Muchos inmigrantes haitianos que acampan desde la semana pasada bajo un puente en el pequeño pueblo fronterizo de Del Río, en Texas, están siendo liberados en Estados Unidos, dijeron el martes dos funcionarios estadounidenses a la agencia AP, a pesar de las declaraciones públicas del gobierno del presidente Joe Biden de que las miles de personas asentadas en la zona se enfrentaban una expulsión inmediata.
Los haitianos han sido liberados “a gran escala” en los últimos días, según un funcionario que cifró en miles las personas en esta situación. La fuente, con conocimiento directo de las operaciones, habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizada a discutir el asunto en público.
Muchos han quedado libres con un aviso para acudir a una oficina de inmigración en el plazo de 60 días, una solución que requiere menos tiempo de procesamiento para los agentes de la Patrulla Fronteriza que ordenar una aparición ante una corta migratoria, y apunta a la velocidad con la que se están moviendo las autoridades, apuntó el funcionario.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) ha estado transportando en bus a los haitianos desde Del Río a El Paso, Laredo y el Valle del Río Grande, a lo largo de la frontera de Texas, y esta semana incluyó vuelos a Tucson, Arizona, explicó la fuente. Los migrantes están siendo procesados por la Patrulla Fronteriza en esos puntos.
Un segundo funcionario, también con conocimiento directo del asunto y que habló bajo condición de anonimato, señaló que una gran cantidad de haitianos estaban siendo procesados conforme a la ley migratoria y no estaban embarcando en los vuelos de deportación a Haití que comenzaron el domingo. El funcionario no pudo ser más específico con respecto a la cifra.
Las presuntas liberaciones ocurren tras una aguda crisis en la frontera generada a mediados de la semana pasada con la llegada masiva de inmigrantes, en su gran mayoría de nacionalidad haitiana, a Del Río, en Texas, donde se instalaron en un campamento improvisado bajo un puente después de cruzar desde Ciudad Acuña, México.
Desde el 19 de septiembre, las autoridades estadounidenses habían cerrado el paso de migrantes en todo el sector. Según la agencia AP, un grupo intentó cruzar en un punto a una milla al este y fueron interceptados por agentes a caballo de la Patrulla Fronteriza y fuerzas de seguridad tejanas.