Este jueves los príncipes William y Harry volvieron a mostrarse juntos en los jardines del Palacio de Kensington, para la inauguración de una estatua que retrata a su madre, en el día en que la princesa de Gales hubiera cumplido 60 años. Los hijos de Lady Di fueron los encargados de quitarle el manto a la obra de arte para revelarla ante el mundo.
Desde la cuenta oficial de Twitter de los duques de Cambridge difundieron un comunicado para expresar su emoción por esta fecha especial: “Hoy, en lo que habría sido el 60 cumpleaños de nuestra madre, recordamos su amor, fuerza y carácter, cualidades que la convirtieron en una fuerza para el bien en todo el mundo, cambiando innumerables vidas para mejor”.
“Todos los días deseamos que ella todavía esté con nosotros, y nuestra esperanza es que esta estatua sea vista para siempre como un símbolo de su vida y su legado”, confesaron. Sobre el final le agradecieron a los responsables de crear la pieza y rediseñar el jardín: “Gracias a Ian Rank-Broadley, Pip Morrison y sus equipos por su excelente trabajo para que esto sucediera”.
“Gracias también a todos aquellos alrededor del mundo que mantienen viva la memoria de nuestra madre”, concluyeron. En las afueras del palacio muchos ciudadanos acudieron a dejar ramos de flores, fotos y banderas de “la princesa del pueblo”, para honrarla como todos los años.
La princesa de Gales, Diana Spencer, que murió en un accidente de coche en París en 1997, habría cumplido 60 años este jueves.